
“Preforte ha trabajado en su línea de hormigones Ecoforte, para construir un entorno más sostenible, y para crear y dejar un legado más verde para las futuras generaciones en Bolivia y en el mundo”.
Julio César Suárez Cuéllar

El 40% del impacto del ciclo de vida de un edificio proviene del carbono incorporado, es decir, el carbono emitido por la fabricación de materiales durante la construcción del edificio.
En las instalaciones de La Cámara de la Construcción de Santa Cruz (Cadecocruz), la empresa Preforte hizo la presentación de su producto Ecoforte.
El acto comenzó ofreciendo una visión general de la implementación de la tecnología CarbonCure a cargo del ingeniero Algo Sülzer Limpias. “La Cámara de la Construcción de Santa Cruz ha trazado el camino de la transformación del sector constructor del país hacia la sostenibilidad y con gran satisfacción podemos afirmar que no se trata de discursos y es Preforte, una de nuestras empresas asociadas que fabrica hormigón sostenible o verde, aplicando la tecnología CarbonCure para reducir la huella de carbono y potenciar la cadena de valor de la construcción sostenible”, resaltó.
Por su parte Tomislav Carlos Kuljis Fuchtner, presidente de Preforte, destacó la creación de la línea Ecoforte con una gama de hormigones ecológicos, que utilizan la tecnología canadiense CarbonCure. “Comprometida con la disminución de la huella de carbono y como empresa responsable con el medioambiente, asumimos el desafío de comprender y mitigar los impactos medioambientales actuales, de uno de los materiales más importantes en la construcción, como es el hormigón”, afirmó.
CarbonCure fue fundado en 2007 por Rob Niven. Rob había estudiado el secuestro de carbono en el hormigón mientras completaba una Maestría en Ingeniería en la Universidad McGill. Durante sus estudios, Rob asistió a una cumbre de las Naciones Unidas sobre el clima, donde vio de primera mano la urgente necesidad mundial de reducir las emisiones de carbono. Rob comprendió que el hormigón tiene la capacidad de mineralizar químicamente el carbono y buscó desarrollar una solución para incrustar permanentemente el CO2 residual en la producción diaria de hormigón.
Posteriormente se realizó un desglose de cómo funciona la tecnología, seguida por una presentación sobre el proceso de instalación, a cargo de Julio César Suárez Cuéllar, gerente general de Preforte. “Ecoforte se produce con CarbonCure, lo que significa que se produce utilizando dióxido de carbono reciclado, capturado que se mineraliza una vez inyectado en la mezcla del hormigón Ecoforte. El CO2 mineralizado permite a Preforte reducir las emisiones de dióxido de carbono de sus mezclas Ecoforte sin comprometer la resistencia deseada de sus hormigones. En definitiva, Ecoforte es el mismo hormigón fiable, pero con una huella de carbono reducida sin afectar ni las propiedades en estado fresco o en estado endurecido”, puntualizó.
“Preforte ha trabajado en su línea de hormigones Ecoforte, para construir un entorno más sostenible, y para crear y dejar un legado más verde para las futuras generaciones en Bolivia y en el mundo”.
Julio César Suárez Cuéllar
A continuación, se aclararon algunas cuestiones generales sobre cómo el producto se desarrolla en el mercado:
La Tecnología CarbonCure no afecta el tiempo de carga en planta, lo cual significa que no afecta los tiempos de construcción.
EI CO2 purificado en un entorno no cerrado es una sustancia segura, es el mismo CO2 que se utiliza para hacer bebidas carbonatadas. Además, una vez que se inyecta en la mezcla de hormigón, el CO2 se convierte químicamente en un mineral de carbonato de calcio, conocido como caliza, en minutos, antes de que el camión salga de la planta de producción de hormigón.
El hormigón es crucial para desarrollar edificios sustentables, pues ofrece la fuerza para construir estructuras altas, resilientes, con un buen aislamiento. En promedio se ahorran 15 kg. de CO2, por metro cúbico de hormigón usando la tecnología de CarbonCure.
“Preforte con su línea de hormigones Ecoforte, durante la gestión 2022, dejará de emitir más de 6.3 millones de kilogramos de CO2 en el medioambiente lo que equivale a la cantidad que puede absorber 3.4 millones de m2 de bosques en un año y además se suma a los más de 600 sistemas instalados actualmente en más de 21 países”, finalizó Julio Suárez Cullar. ■